Por: Everildo Gonzalez Alvarez
El 14 de Enero del ya 1811, sabiéndose la aproximación de los ejércitos realistas, a las doce del día dio comienzo la evacuación de la plaza, de Guadalajara. El ejército Insurgente fue dividido en tres partes marchando a la cabeza de la primera el cura Hidalgo y Allende que llevaban lo mejor de las tropas de infantería , caballería y artillería, la segunda parte iba al mando de don Ruperto Mier con dos mil hombres y veintisiete cañones , la tercera parte iba al mando de don José Antonio Torres quien había conquistado Guadalajara unos días antes, llevaba noventa cargas que había decomisado en el puente de Guadalajara al intendente español Anzorena . .
En la salida de Guadalajara, el ejército independentista dividido en tres columnas , cada una tomó diferentes rumbos, la primera al mando de Miguel Hidalgo y en la que también iba Allende, se fueron a acampar al puente de Guadalajara en donde esperaban noticias de las otras dos. La segunda columna al mando del coronel Ruperto Mier, tomó posiciones en Urepetiro que se encontraba muy cercano a la población de Zamora ya en nuestro Michoacán y la tercera al mando de Antonio Torres, junto con Abasolo iba a la retaguardia de la de la de Hidalgo y Allende .
Así estaban las cosas cuando a Hidalgo le fue comunicado que don Ruperto Mier en las inmediaciones de la población de Zamora había sido derrotado cuando intentaba cerrarle el paso al realista Cruz, habían librado una cruenta batalla de una hora y media y el maltrecho ejército de Cruz aun cuando victorioso había quedado maltrecho y se refugió en la ahora fresera y chonguera ciudad de Zamora a componer su artillería, se dice que era el 15 de Enero de 1811. En vista de lo anterior, Hidalgo llevó al ejército al lugar conocido como La Alhaja en donde esperó a que llegara Antonio Torres y Abasolo y junto con Allende se reunieron para determinar qué hacer, había dos opciones: o bien no presentarles combate pues Allende consideraba que la indisciplina de los insurgentes era un factor en contra ante el bien organizado y disciplinado ejército realista, y la segunda opción era enfrentarlos como Hidalgo lo proponía., el caso fue puesto a votación y por mayoría se decidió poner en práctica el plan del cura de Dolores aun cuando sabían que enfrentar a Calleja podría ser el combate decisivo para la causa de la independencia.
Calleja acampaba en Lagos y desde ahí se movió La Joya esto en la tarde del 16 de Enero ocupando las partes altas del lugar y de ahí mandó una partida de soldados a reconocer el lugar y a cerciorarse de la distancia en que se encontraban los insurgentes, está partida fue atacada y derrotada y ya en la noche regresó parte de esa partida para informar a Calleja que las fuerzas insurgentes se encontraban en el puente Calderón al que habían llegado el 16 de ese Enero de 1811 en donde habían tomado posiciones en las alturas y llanuras por donde pasa el camino a Guadalajara.
Era claro para todos, insurgentes y realistas, que de ese combate que se libraría dependían la caída de los españoles y que por lo tanto la ciudad de México quedaría en manos de los insurgentes, o bien la caída de los independentistas con lo que el movimiento quedaría aplastado, de ahí la importancia de ese combate.
Hidalgo y los demás jefes comandaban un ejército de poco más de noventa mil hombres, sesenta y siete cañones , los flecheros de Ocotlán , quince mil hombres de a caballo y una buena cantidad de personas que sin armas solo hacían bulto. La batalla se llamó del Puente de Calderón y este se encuentra sobre el río del mismo nombre Las posiciones de los independentistas estaban divididos de la forma siguiente: al mando de José Antonio Torres se encontraba la artillería principal y el grueso de la gente, el ala de defensa de la izquierda se encontraba al mando de Aldama , la división situada de un lado del río Calderón la comandaba Gómez Portugal , la caballería se le encomendó a Abasolo y Allende al que se le nombró jefe supremo dirigía todas las acciones y al cura Hidalgo se le encomendó las reservas que pues eran las fuerzas totalmente indisciplinadas y que muchos se encontraban sin armas . Calleja había sido informado que en cuanto a número los insurgentes eran superiores pues rebasaban los noventa mil pero por varias informaciones dedujo que la victoria podría ser de los realistas y para enfrentar a Allende y las demás tropas, dispuso que al día siguiente las tropas se dividieran de la forma siguiente: el ala izquierda con cuatro cañones y dos mil hombres quedó al mando del conde de la Cadena , mientras Calleja tomaba el resto de las fuerzas .
Era muy claro que la batalla que se tendría el 17 de Enero de ese 1811, enfrentaría dos ideales , por un lado a los realistas al mando de Calleja en quien el Virrey Venegas había depositado toda su confianza para aplastar al movimiento independentista, el puesto del Virrey se tambaleaba y éste no tenía la intención de que los españoles que por tantos años habían gobernado al país, ahora lo abandonaran a una chusma de mexicanos; por el otro lado Allende, Aldama, Abasolo, Antonio Torres y principalmente Hidalgo tenían un ideal: lograr que los mexicanos dejaran de ser dominados por los españoles, que los de la Madre Patria dejaran de explotar para su beneficio los recursos naturales, que dejaran de esclavizar a una buena cantidad de personas y que en general se fuera en contra de la pobreza. La batalla por los dos ideales estaba por iniciarse a un lado del río Calderón que no se si aun existe.
Tal vez el día más esperado por el Virrey Venegas y en general por los españoles había llegado, se creía que ese 17 de enero de 1811 se daría por finalizado el desorden que una chusma de mexicanos había llevado a cabo con algo que todos consideraban no era el momento adecuado para desafiar al ejército realista. Se confiaba mucho en Calleja a quien se le consideraba el mejor para acabar con Hidalgo y sus ingenuos seguidores, así consideraban muchos españoles que ansiaban seguir explotando las riquezas naturales de este México..
Allende seguía en su posición que consideraba aventurado enfrentar a Calleja en ese lugar, en el puente de Calderón , afirmaba que el ejército insurgente no tenía la disciplina necesaria para llevar a cabo una batalla tan importante. Sin embargo como se verá más adelante, los insurgentes sí tuvieron esa posibilidad pero solo un golpe de suerte salvó a los realistas de una estrepitosa derrota que hubiera llevado a Hidalgo a una contundente victoria y tal vez a consumar la independencia de México, pero eso se verá adelante.
El 17 de enero, Calleja ordenó al comandante de su artillería Díaz de Ortega que iniciara el fuego según lo planeado, esto era con un fuerte cañonazo a las posiciones de los independentistas , solo que como vieron que el tiro era muy alto decidieron que entonces mejor entrara la caballería que estaba bajo las ordenes del general Miguel de Emparán y atacara el ala izquierda , en tanto que el conde de la Cadena atacaba vadeando el río, sin embargo la estrategia no resultó y en esta acción el general Emparán fue herido de dos balazos y al caer del caballo un insurgente se le acercó y le dio muerte . La anterior acción desorganizó al ejército realista que huyó hasta llegar al campamento realista de La Joya .
Tomado en parte de; México a través de los siglos y de Hidalgo de Juan n. Chavarri
Continuará
SUSCRÍBETE A NUESTRO CANAL EN YOUTUBE: Viviendo Mi Ciudad